¿Cuál es la situación del hidrógeno en España?
Por Santiago Serna (Investigador predoctoral, IIT-Comillas)
El hidrógeno se ha convertido en el tema energético de moda en Europa, hace unos días su nombre estaba en prácticamente todos los medios de comunicación gracias al acuerdo alcanzado entre España y Francia para la construcción de un "Corredor de Energía Verde" como alternativa al MidCat que estaría preparado para transportar hidrógeno verde.
Este color verde no hace referencia a ninguna cualidad de la molécula sino al método empleado para su producción. Se habla de hidrógeno verde cuando éste se produce a partir del agua en un proceso conocido como electrólisis que utiliza electricidad renovable y que no tiene emisiones de CO2. Por otra parte, el hidrógeno gris es aquel producido a partir de gas natural en un proceso con muchas emisiones de CO2 a la atmosfera. Si estas emisiones son capturadas y almacenadas, entonces se habla de hidrógeno azul.
Es el hidrógeno renovable el que está llamado a jugar un papel clave en la transición energética y del que hablaremos en este artículo, en el que se resumen los puntos más importantes del informe anual publicado por la Catedra de Hidrógeno de Comillas el pasado 25 de octubre[1]. El informe titulado “Estado actual del sector del hidrógeno en España y contexto global” hace un repaso de los hitos más importantes relacionados con el hidrógeno a nivel europeo, nacional e internacional.
Contexto europeo
Para encontrar la primera mención al hidrógeno dentro del debate energético europeo tenemos que remontarnos a 2019 con la publicación del pacto verde europeo. Un paquete de iniciativas políticas con el objetivo de situar a la Unión Europea (UE) como el primer territorio climáticamente neutro en 2050. En este documento se incluyó por primera vez al hidrógeno como un instrumento para luchar contra el cambio climático, sin embargo, su papel se veía limitado a algunos usos puntuales en el transporte.
Es con la publicación de la hoja de ruta del hidrógeno en julio de 2020 cuando éste se convierte en uno de los pilares de la agenda de descarbonización de la UE reconociendo su importancia para la consecución de los objetivos de reducción de emisiones a largo plazo. Hasta esta fecha se había puesto el foco en el horizonte 2030 priorizando la descarbonización de la generación eléctrica, la electrificación de todos los sectores donde esta fuera posible y el aumento de la eficiencia energética. Sin embargo, cuando miramos más allá de 2050 la electrificación y las energías renovables no son suficientes para conseguir la descarbonización total de la economía y es necesario encontrar alternativas para aquellos sectores donde la electrificación no es posible o tiene numerosas limitaciones. Sectores como la industria pesada, el transporte marítimo, el transporte aéreo o el transporte pesado por carreta, responsables de un 30% de las emisiones globales de CO2 a la atmosfera y en los que el hidrógeno es la única alternativa existente a los combustibles fósiles [3]. Sin embargo, esta no es la única motivación detrás de la hoja de ruta, en ella se menciona también la importancia del hidrógeno para aumentar la independencia y la seguridad energética del continente europeo, algo de vital relevancia en la situación geopolítica actual.
El hidrógeno (renovable) está visto como posible solución, o mejor dicho parte de la misma, para ambos problemas a la vez por lo que no es de extrañar que los objetivos de producción de la hoja de ruta se hayan visto revisados al alza dos veces desde su publicación en 2020. Como se puede ver en la figura 1, el objetivo inicial de 40 GW de capacidad de electrólisis instalada para 2030 se revisó al alza en 2021 con el paquete fit for 55 donde, además, se añadió un objetivo de producción de hidrógeno. Tan sólo un año después estos objetivos se volvieron a incrementar en el marco del plan REPowerEU, un plan publicado en mayo de 2022 como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia que otorga al hidrógeno un papel clave para reducir la dependencia del gas ruso antes de 2030.
El citado RepowerEU marca unos objetivos de producción de hidrógeno de 20 millones de toneladas (Mt) para 2030, de los cuales 10Mt serán importados de fuera de la UE. No obstante, las estimaciones de diversas instituciones parecen indicar que no seremos capaces de alcanzar esta capacidad de producción propia. Bloomberg NEF estima que para 2030 la producción de hidrógeno en Europa será de 3 Mt, mientras la IEA en su informe Hydrogen Review 2022 estima una capacidad instalada de 39 GW y una producción de 6 Mt. En ningún caso estaríamos cerca de cumplir con los ambiciosos objetivos marcados por RepowerEU siendo necesario acelerar el despliegue de electrolizadores y/o complementar esta capacidad de producción de hidrógeno renovable con hidrógeno azul.
Figura 1. Objetivos de producción de hidrógeno en Europa
Esta revisión al alza de los objetivos de producción de hidrógeno ha venido acompañada de varios hitos muy positivos para el desarrollo del sector como la aprobación de las dos primeras líneas IPCEIs (Proyectos de Interés común europeo del hidrógeno) del hidrógeno: “Hy2Tech” con un valor de 5.400 M€ dedicada a la movilidad y “Hy2Use” con un valor de 5.200 M€ dedicada a las aplicaciones industriales. En total 76 proyectos se beneficiarán de estas ayudas (al menos 7 de ellos en España) contribuyendo a la consecución de los ambiciosos objetivos fijados por la UE para 2030.
Contexto nacional
Siguiendo la línea marcada por la UE, España publicó en octubre de 2020 su hoja de ruta del hidrógeno titulada “Hoja de Ruta del Hidrógeno: una apuesta por el hidrógeno renovable”. En esta se hacía énfasis en la oportunidad que tiene España para convertirse en una referencia en la producción y utilización del hidrógeno renovable gracias a los excelentes recursos renovables del país.
Como primer paso para el cumplimiento de este objetivo, se aprobó en abril de 2021 destinar 1555 M€ procedentes de fondos europeos para impulsar toda la cadena de valor del hidrógeno renovable. En diciembre de ese mismo año se publicaron las primeras ayudas para proyectos de hidrógeno con un valor total del 400 M€. En concreto se trata de los programas de ayuda a la cadena de valor innovadora del hidrógeno renovable y de los programas de ayuda a proyectos pioneros y singulares. El acceso a estas ayudas se articula a través de convocatorias en las que pueden participar de forma competitiva distintas empresas y en las que se evalúan criterios económicos, técnicos y sociales.
Ambas convocatorias deberían haberse resuelto para octubre de 2022, sin embargo, el gran numero de solicitudes recibidas ha hecho que se retrasen algunos meses más de lo esperado. El retraso en la resolución de los primeros programas de ayuda es una mala noticia, sin embargo, es una muestra del interés real que existe por desarrollar una economía del hidrógeno en España. Así lo demuestra el mapa de proyectos de hidrógeno preparado por la catedra para este primer informe:
Según la información recogida en el mismo hay por lo menos 79 proyectos de hidrógeno planificados en España de los cuales un 77% se encuentra aún en estudio de factibilidad, es decir, en una fase muy temprana de su desarrollo (figura 2). Del 23% restante, un 18 % se encuentra en construcción o realizando los trámites administrativos para iniciar la misma y el otro 5% (4 proyectos), corresponde a proyectos de hidrógeno que ya se encuentran operativos en España, siendo uno de los países pioneros a nivel mundial en relación al uso del hidrógeno renovable. Se trata de la planta de producción de hidrógeno verde de Fertiberia-Iberdrola en Puerto Llano [4], el proyecto Power To Green en Mallorca [5], la hidrogenera para autobuses públicos de Barcelona [6]y el proyecto de logística H2-Login en Toledo [7].
Figura 2. Estado de los proyectos de hidrógeno en España
La información recogida en el mapa de proyectos permite también hacer un análisis del cumplimiento de los principales objetivos marcados por la hoja de ruta en España (figura 3). Según las previsiones del informe el objetivo de la capacidad instalada se cumpliría ampliamente tanto para 2024 (812 MW proyectados frente a 300-600 MW) como para 2030 (15,5 GW proyectados frente a 4 GW). También se cumplirían los objetivos en relación a la inversión prevista (11.297 M€ frente a 8.900 M€) y al número de hidrogeneras proyectadas (más de 150), aunque no se especifica cuantas de ellas serán de acceso público.
En definitiva, según las proyecciones del informe parece que España superaría los principales objetivos marcados por la hoja de ruta, aunque cabe recordar que la mayoría de proyectos aún se encuentran en una fase muy temprana de desarrollo y muchos de ellos puede que no lleguen a entrar en operación en las condiciones y plazos declarados. También hay que destacar que la hoja de ruta se publicó en 2020 y sus objetivos estaban en línea con los de la hoja de ruta europea, objetivos que como vimos anteriormente, se han revisado al alza en dos ocasiones. Para hacer frente a esta nueva situación los objetivos a nivel nacional deberían ser más ambiciosos, algo que tendrá que debatirse en 2023 cuando está programada su revisión.
Contexto internacional
En agosto de 2022 se publicó en Estados Unidos el Inflaction Reduction Act (IRA) un amplio proyecto de ley de 750.000 millones de dólares de los de los que unos 370.000 millones se destinan a energías renovables, vehículos eléctricos e hidrógeno bajo en emisiones. Las ayudas se conceden en forma de créditos fiscales ya sean para la producción (PTC) o la inversión (ITC), siendo los promotores del proyecto quienes eligen que ayuda prefieren. La cuantía y requisitos de emisiones asociados de estas ayudas se encuentran en las figuras 4 y 5.
Figura 4. Cuantía de ayudas a la producción del IRA
El IRA contempla ayudas a la producción de hidrógeno de hasta 3$/kgH2 o a la inversión de hasta un 30% dependiendo en ambos casos de la intensidad de las emisiones y de un mecanismo multiplicador. Existen dos opciones para acceder a este multiplicador: que la construcción de la instalación comience como máximo 60 días después de la publicación de las directrices de aplicación o que, pasados estos 60 días, el proyecto cumpla ciertos requisitos de mano de obra, salario, replicabilidad y escala. De esta forma, el IRA pretende no sólo promover la producción de hidrógeno, si no hacerlo cuanto antes, motivando con la inclusión del multiplicador que muchos proyectos que aún estaban a la espera de una decisión final de inversión se materialicen para poder beneficiarse de estos créditos.
Conclusiones del informe
Comenzamos el artículo diciendo que el hidrógeno es el tema energético de moda en Europa, pero hemos visto que es más que una moda y que existe un interés real en desarrollar este sector tanto a nivel europeo como a nivel nacional. Interés que alcanzó su punto álgido con la reciente invasión de Ucrania por parte de Rusia que ha puesto de manifiesto el problema de dependencia y seguridad energética que afronta el continente.
Se han dado muchos pasos en la dirección correcta en los últimos meses haciendo que Europa en general y España en particular se posicionen como actores principales en el futuro mercado del hidrógeno. No obstante, no hay que olvidar que existe una gran competencia internacional por desarrollar este sector y atraer inversiones. En este sentido, la publicación del IRA en Estados Unidos supone el paquete de ayudas al hidrógeno más ambicioso lanzado a nivel mundial ofreciendo ayudas a la producción de hidrógeno de hasta 3$/kgH2 con un sistema de concesión de ayudas muy sencillo en el que todo proyecto que cumpla con los requisitos de reducción de emisiones puede beneficiarse de las mismas.
En España, por el contrario, llevamos un año esperando la resolución de las dos primeras convocatorias de ayuda al hidrógeno por un valor de 400 M€. Estas asignaciones son pequeñas teniendo en cuenta que hay 1.555 M€ disponibles para invertir en hidrógeno que aún no se sabe cuándo se van a ejecutar. Es necesario agilizar todo el proceso de concesión de ayudas tanto a nivel nacional como a nivel europeo si queremos conseguir los ambiciosos objetivos marcados para 2030, pero, sobre todo, si queremos ser competitivos en un contexto internacional.
[1] El informe completo se encuentra en la página web de la catedra (https://www.comillas.edu/catedra-de-estudios-sobre-el-hidrogeno)
[2] Para este primer informe se creo un mapa interactivo de proyectos de hidrógeno en España elaborado a partir de la mejor información pública disponible. Este mapa permite un análisis de los proyectos de producción y utilización de hidrógeno en la Península Ibérica, permitiendo estudiar aspectos como el grado de avance de los proyectos, tecnologías y modo de conexión con las energías renovables o tipos de offtakers (disponible en: https://www.comillas.edu/catedra-de-estudios-sobre-el-hidrogeno)
[3] “What Are the Hard to Abate Emissions? · Abatable.” https://www.abatable.com/blog/hard-to-abate-emissions (accessed Nov. 05, 2022).
[4] I. CORPORATIVA, “Iberdrola construye la mayor planta de hidrógeno verde para uso industrial en Europa,” Iberdrola. https://www.iberdrola.com/conocenos/lineas-negocio/proyectos-emblematicos/puertollano-planta-hidrogeno-verde (accessed Sep. 07, 2022).
[5] “Power to Green Hydrogen Mallorca | ACCIONA | Business as unusual.” https://www.acciona.com/projects/power-to-green-hydrogen-mallorca/ (accessed Sep. 07, 2022).
[6] I. CORPORATIVA, “Iberdrola suministrará hidrógeno verde a los autobuses de Barcelona en 2021,” Iberdrola. https://www.iberdrola.com/sala-comunicacion/noticias/detalle/iberdrola-suministrara-hidrogeno-verde-autobuses-barcelona-2021 (accessed Sep. 07, 2022).
[7] “FM Logistic y Tecnove planean en Illescas el primer proyecto integrado de hidrógeno verde en el sector logístico,” pv magazine España, Jan. 28, 2021. https://www.pv-magazine.es/2021/01/28/fm-logistic-y-tecnove-planean-en-illescas-el-primer-proyecto-integrado-de-hidrogeno-verde-en-el-sector-logistico/ (accessed Sep. 07, 2022).
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